Roscon de Reyes

Hace unos años, si me hubiera dicho una pitonisa, que yo iba a ser capaz de hacer un roscón de estas características, la hubiera dicho que se dedicara a otra cosa, pues sus poderes para predecir el futuro eran más bien... absurdos.

Ahora, me parece mentira, pero he conseguido hacer en mi cocina esta maravilla de roscón.

He de reconocer que me aventuré sin tener demasiada fe en conseguirlo y que hasta tuve la tentación de mandarlo todo a paseo, pero una vocecita desde el interior de la masa me decía "dame otra oportunidad...intentalo"

Y la hice caso...continué adelante y ahora no me arrepiento, pues el resultado ha sido magnífico.

Aquella tarde en que lo horneé, estuve dando la paliza a mi marido diciendo " pero que contenta estoy!...a que es muy bonito" Mi marido la primera vez, me contestó...las siguientes no me hizo ni caso, pero cuando lo probó y dijo que esta bueno, me puse mas contenta todavía, pues él tiene la costumbre de no halagar las cosas...él es así!

LA RECETA

Antes de empezar, puntualizar que todos los ingredientes han de estar a temperatura ambiente.

Con estas cantidades, salen dos roscones hermosos.

INGREDIENTES
* 500gr de harina de fuerza. (Yo usé casi 750 gr, aunque en principio es mejor solo usar los 500 gr y si hiciera falta se va añadiendo poco a poco según te pida la masa)
* 2 1/2 sobres de levadura seca de panadería
* 100 gr. de azúcar
* 150 ml. de leche tibia
* 1 copita de ron añejo (opcional...yo no puse)
* 3 huevos
* 60-70 ml de agua de azahar (según lo queramos más o menos aromatizado) Al echar más líquido necesitaremos más harina
* 60 gr. de mantequilla
* 60 gr. manteca cerdo
* Ralladuras de naranja y limón
* 10 gr. de sal
* 1 Sorpresa
* Azucar humedecido para adornar. Se puede usar también frutas escarchadas, almendras laminadas, cerezas en almibar etc...


MASA DE ARRANQUE:

Amasar 100 gr de la harina con la levadura y 100 cc. de leche tibia, hacer una bola, hacer unos cortes en la parte superior, tapar con un paño, dejar reposar 90 minutos en un lugar cálido y sin corrientes. Esta masa de arranque puede reposar cuanto tiempo se quiera. Yo la hice por la tarde y luego a la noche la metí en el frigorífico. Según parece las fermentaciones lentas en frío dan como resultado unas masas más esponjosas.

MASA

1º.- Amasar todos los ingredientes que nos restan. Cuando tengamos todos incorporados es el momento de integrar la masa de arranque.Amasar durante un buen rato hasta obtener una masa fina y muy elástica que al coger un trozo con ambas manos se estire y no se rompa. Si nos hace falta añadir mas harina, hacerlo muy poco a poco, porque se trata de hacer una masa un poco humeda y blanda. Una vez amasada hacer una bola poner con las manos sobre toda ella un poco de aceite de oliva para que al reposar no haga costra.

Esta masa la dejamos reposar al menos 1 hora hasta que doble su volumen en las mismas condiciones que la anterior para que realize el primer levado.

2º.- Cuando ya ha levado por primera vez, sacar la masa del bol sobre una superficie ligeramente enharinada. Amasar bien para desgasificar, golpear la masa y bolearla. En este punto, si la masa está bien hecha será una masa blanda pero no pegajosa, si estuviera pegajosa ayudarse en el amasado con harina pero muy poca la imprescindible para que no se pegue a la mesa o a las manos.

Volvemos a dejar reposar para que haga el segundo levado en las mismas condiciones que la vez anterior.

3º.- Cuando haya doblado por segunda vez es el momento de separar la masa en dos porciones para formar los dos roscones. Volvermos a desgasificar, pero no en exceso, y hacemos dos bolas.Este es el momento que hemos de elegir si queremos congelar la masa.

4º Ponemos la bola de masa sobre una bandeja de horno y dejamos unos 15 minutos que repose para que se relaje.

Cuando veamos que puede estar ya relajada, metemos las manos en el centro de la bola y vamos estirando desde el centro hacia los lados. Si vemos que la masa se contrae y tiende a volverse hacia el centro, es que no está lo suficientemente relajada, con lo que la volvemos a dejar en reposo.

Como queremos que el roscon crezca hacia arriba, al formarlo iremos remetiendo la masa hacia el centro a la vez que formamos el hueco central y tirando hacia afuera.

Una vez formado el roscón, pintamos con huevo batido. Si vamos a adornar con fruta escarchada, es el momento de ponerla para que la masa leve con ella y se pegue bien.Tapamos con un film o plástico engrasado para que leve por tercera vez.


5º.- Antes de que termine el tercer levado, precalentar el horno a 200º (arriba y abajo) y poner en la base del horno un recipiente pequeño apto para horno lleno de agua . Esto es muy importante para que el roscón no esté reseco.

Una vez terminado el tercer levado, volver a pintar con huevo batido.Lo haremos con mucha delicadeza para que no se nos baje. En este momento es cuando hay que añadir el azúcar humedecido o las almendras.

Poner en el horno, a media altura-baja e inmediatamente bajar la temperatura a 180º C y mantenerlo entre 25-30 minutos. Vigilar para que no se queme ni tueste demasiado.

ANOTACIONES SOBRE LOS LEVADOS

Según mi experiencia:
.- No te desesperes con los levados. Depende de la temperatura ambiente, la masa tardará más o menos en fermentar. Un truco para ayudar a la masa a levar es encender el horno y ponerlo a 40 ºC. Apagarlo y meter la masa dentro del horno. En mi caso ha sido muy útil, pues como la temperatura era muy fría, la masa no levaba.
.- La masa de arranque puedes ponerla en el frigorífico para que fermente lentamente. Cuando la vayas a usar, déjala a temperatura ambiente para que esté manejable.

Ya no voy a gastar ni en euro más en los roscones insulsos que nos venden en las pastelerías a un precio desorbitado, aprovechando en tirón de las fiestas.

El roscón que se coma en mi casa, habrá salido de mis manos.